La NBA anunció este martes la idea de poner en marcha un nuevo experimento de cara a modificar la duración de los partidos con el fin de reducir el desgaste físico en los jugadores. La organización probará este nuevo cambio este domingo, un Brooklyn Nets - Boston Celtics cuya duración de cada cuarto se verá disminuida de doce a once minutos para un total de 44 minutos de partido.

Sin embargo, Erik Spoelstra, entrenador de Miami Heat, cree que el problema no está en la duración de los encuentros en sí, sino en la gran cantidad de partidos que se disputan a lo largo de la temporada.

Spoelstra, como él insinúa, está lejos de ser la primera voz que ha sugerido un cambio en el número de partidos disputados en temporada regular. Sin embargo, con tanto estadio que necesita ser llenado y con las cadenas televisivas ansiosas por llenar la programación, es difícil que la opinión personal del entrenador de los Heat pueda con el interés financiero existente en la NBA.

LeBron James tuvo una complicada papeleta tras abandonar Miami en verano. El ya jugador de los Cleveland Cavaliers fue invitado a la boda de su ex-compañero en Florida, Dwyane Wade, un mes más tarde de su decisión de hacer las maletas rumbo a su reencuentro con la afición de la franquicia de Ohio.

Como no es de sorprender, James no se sintió especialmente cómodo en la ceremonia. Por un lado, el cuatro veces MVP no se dirigió en ningún momento a la mesa de Chris Bosh, a quien, según diversas fuentes, no ha vuelto a hablar desde su marcha a Cleveland.

Además, tuvo que compartir habitación con Pat Riley, Presidente de los Heat, por lo que la experiencia de la superestrella de los Cavs tuvo que ser de todo menos agradable.

Cuatro años de tiempo ha llevado a Dan Gilbert, propietario de los Cleveland Cavaliers, reconciliarse con LeBron James tras la decisión del jugador de marcharse a Miami para ganar el anillo que veía imposible ganar en Cleveland.

Pat Riley, presidente de operaciones de los Heat, no ha caído en el mismo error y ha emitido el siguiente comunicado lamentando la decisión de LeBron pero aceptándola como no podía ser de otra manera.

Igual que me siento decepcionado por la decisión de LeBron de salir de Miami, nadie puede culpar a alguien que quiere volver a casa. Los últimos cuatro años han sido una etapa increíble para South Florida, fans de los Heat, la franquicia y para todos los jugadores que han formado parte de ella. LeBron es un fantástico líder, atleta, compañero y persona, y todos lamentamos verle marchar.

Durante los últimos 19 años, desde que Micky Arison y yo trabajamos juntos, los Miami Heat han sido una franquicia ganadora; hemos ganado varios campeonatos y competido por otros más. Micky, Erik Spoelstra y yo seguimos comprometidos con hacer lo que haga falta para ganar y por competir por los campeonatos en los años venideros. Hemos demostrado que podemos hacerlo y volveremos a hacerlo otra vez.

Miami Heat sigue en su 'caza' particular en la agencia libre. Tras llamar a Pau Gasol y reunirse con Luol Deng, la franquicia de Florida se reunió el pasado sábado con Marvin Williams para comunicarle el interés del equipo en contar con él, según apunta Marc J. Spears en Yahoo! Sports.

El presidente de la franquicia, Pat Riley, y el entrenador, Erik Spoelstra, estuvieron presentes en la negociación. Al no poder ofrecerle al jugador un gran salario, el principal aliciente de la reunión es la posibilidad que Miami le ofrece a Williams de ganar un anillo de campeón de la NBA.

Hasta el momento, los Heat no han cerrado ningún acuerdo en la agencia libre, pero los contactos continúan sucediéndose con el objetivo que exigía LeBron James para renovar: mejorar la plantilla y volver a ser los principales candidatos al título.

Miami Heat se entrevistó con Luol Deng en una reunión que ocurrió el pasado sábado según ha informado ESPN y Yahoo! Sports. Spoelstra y Riley querían convencer al alero británico de que fichara por el equipo del sur del Estado de Florida. En la reunión, Spoelstra y Riley le propusieron la utilidad que tendría en los Miami Heat, pero no le realizaron una oferta.

Lo volvieron a hacer en el American Airlines Arena. De nuevo los Spurs arrasaron a los Heat en casa y se quedan a tan sólo un paso de tomarse la revancha ante Miami y ganar su quinto anillo. Tendrán la oportunidad de conseguirlo en casa en el quinto partido pero los Heat saldrán a por todas para alargar la serie e intentar lograr algo que nadie ha conseguido, ganar 3 partidos seguidos para remontar un 3-1 en contra en las Finales. Esta vez no fue una oda al ataque de San Antonio sino una oda a la defensa, anulando por completo el ataque de Miami y dejándoles por debajo del 40% en tiros antes del último cuarto que acabó sobrando.

Lo habían insistido desde Miami; hoy iban a salir a por todas para no verse en una misión más que complicada. Se esperaba un ejercicio físico de Miami exultante y a unos Spurs luchadores pero más relajados. Pues el guionista de estas finales (tal vez un tal Gregg Popovich visto lo visto) decidió que San Antonio siguiese con su recital del Game 3 y consiguiese ganar dos partidos seguidos en Playoffs el American Airlines Arena tras más de dos años. Kawhi se erigía como protagonista desde el principio con grandes rebotes tanto ofensivos y defensivos y Green empezaba agraciado desde la línea de tres. Pero la clave era otra, la clave era la defensa. Una intensa defensa a los Heat hizo que San Antonio dejase a su rival en un 33% de tiros al descanso y con tan sólo 4/15 canastas en la pintura. Mientras en ataque los Spurs no tenían un día perfecto como el anterior día pero seguían ofreciendo un baloncesto precioso con pases imposibles de Boris Diaw y Tiago Splitter abriendo huecos y dejando solos a sus compañeros. Tal era la desesperación de Spoelstra que optó por meter a Tony Douglas para jugar un 'small ball'. LeBron no conseguía tomar el mando y se le notaba cansado o por lo menos falto de fuerzas. A la táctica de Miami contestó Popovich juntando a Parker y Patty Mills que ofrecieron un gran espectáculo de dirección del juego y triples. A falta de un minuto para el descanso se llegó a un +20 que decía mucho de la gran primera parte de los Spurs. 

Se esperaba una reacción de Miami ante el baño (de nuevo) de los Spurs y parecía que llegaba de la mano de LeBron. 10 puntos de la estrella de los Heat dejaban la diferencia en +13 pero pronto volvieron a la intensidad defensiva de la primera parte los Spurs y cortaron cualquier esperanza de remontada. Wade mientras seguía tirando chuflas y totalmente desaparecido con un 1/9 en tiros a la mitad del tercer cuarto. Sólo LeBron, y mayoritariamente desde la línea de tres, conseguía que el marcador no se fuese a un resultado demasiado escandaloso y doloroso. Kawhi seguía con su recital que le deja más cerca de un posible MVP si gana el campeonato su equipo. Al final del tercer cuarto la ventaja era ya de +24 y el partido estaba finiquitado. No tiró la toalla Spoelstra hasta los minutos finales pero al final acabó hincando la rodilla. Los fans de los Heat acabaron abucheando a su equipo en el que podría haber sido el último partido de la temporada en South Beach. El resultado final fue de 107-86 para los de Gregg Popovich. 

P.D. No, Chalmers siguió sin aparecer y Patty Mills sumó en este cuarto partido los mismos puntos que Chalmers en todas las Finales, 14. Sin un base muy difícil lo tienen los Heat para remontar. 

Miami ha cumplido mínimamente el objetivo: llegar a la Finales y poder pelear por el Three-Peat. Historia, han hecho historia incluso sin ganar el anillo. Puede que lo ganen o puede que no, pero este equipo está escrito con letras de oro en la historia de la NBA. Pero LeBron es mucho LeBron; Wade es mucho Wade; y Bosh, Chalmers, "El pájaro" Andersen... todos quieren su joya, y todos van a darlo todo por coneguirlo.

El alero suplente de los Miami Heat, Shane Battier ha ganado el segundo premio Twyman-Stockes de la historia de la NBA, o lo que es lo mismo, el premio al mejor compañero.

 

Para Battier "es un gran honor. Probablemente uno de los mayores honores que he tenido en mi vida. Significa mucho para mí. Siempre he intentado ser un buen compañero de equipo toda mi vida."

 

El veterano jugador de los Heat, 13 temporadas le contemplan, fue calificado por su entrenador, Erik Spoelstra como el "último gran compañero".

 

Battier se convierte en el segundo ganador de este trofeo sucediendo a Chauncey Billups.

 

La votación para este trofeo se realiza de la siguiente manera: primero, un grupo de ex-jugadores de la NBA elige una docena de jugadores merecedores del galardón y luego, los jugadores en activo votan a tres jugadores de esa docena.

 

A continuación tenéis la lista de ganadores con el número de votos de primera posición entre paréntesis:

 

Shane Battier, Miami (67), 1.322
Al Jefferson, Charlotte (29), 798
Dirk Nowitzki, Dallas (28), 784
Chris Paul, L.A. Clippers (40), 754
Pau Gasol, L.A. Lakers (36), 753
Manu Ginobili, San Antonio (14), 739
Channing Frye, Phoenix (24), 568
Andre Iguodala, Golden State (19), 552
Jameer Nelson, Orlando (16), 546
Elton Brand, Atlanta (11), 452
David West, Indiana (16), 447
Mike Dunleavy, Chicago (10), 345

 

 

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