Los Golden State Warriors consiguieron igualar la serie a dos tras una clara victoria cimentada en un estratosférico primer cuarto, donde anotaron 39 puntos. A partir de ahí, supieron administrar las ventajas en un partido en el que fueron superiores a los Clippers, donde solo Jamal Crawford demostró un buen rendimiento, por lo que la victoria se quedó en casa con el 118-97.
El partido comenzó de manera espectacular para los Warriors. El balón fluía bien en ataque y los triples entraron desde el principio, a diferencia del partido anterior. Además, Stephen Curry estaba enchufado desde el inicio, hecho que hizo que todos los aficionados de Oakland vibraran con su equipo. A ello hay que sumar que los Clippers sumaron varias pérdidas en los primeros minutos, y que Chris Paul se fue al banquillo pronto tras dos faltas cometidas. Así, las diferencias en el marcador comenzaron a hacerse importantes a favor de los de casa, y fueron yendo a más gracias a un Stephen Curry brillante que anotó 17 puntos en el primer cuarto con 5/6 en triples. El marcador al final de los primeros 12 minutos era de 39-24.
En el segundo período el ritmo bajó, pero las diferencias se mantuvieron en el marcador. Los Clippers empezaron a entrar en el partido, de la mano de un gran Jamal Crawford, que con 16 puntos daba vida a los suyos, que a pesar de ello no lograron bajar de los 10 puntos en ningún momento. Golden State seguía llevando la manija del encuentro, con una anotación más repartida, aunque vio como Klay Thompson cometía su cuarta falta personal y tenía que sentarse. Pero esto no impidió que la ventaja aumentara ligeramente hasta dejar el marcador al descanso en el 66-48.
En la segunda parte el encuentro se igualó, y los Clippers tuvieron buenos momentos, sobre todo en ataque, donde estuvieron varias veces a punto de bajar de los 10 puntos de diferencia. Blake Griffin y Chris Paul aparecieron para liderar a los de Doc Rivers, mientras que Andre Iguodala era el mejor de los Warriors. Cuando mejor parecían estar los Clippers, dos buenas acciones consecutivas de Stephen Curry volvieron a disparar el marcador hasta los 18 de ventaja con el 89-71 a final del tercer cuarto.
Los angelinos, que estuvieron haciendo la goma durante todo el encuentro, recortaron la distancia en los primeros minutos del último cuarto, llegando a bajar de los 10 puntos de diferencia. Además, los de Mark Jackson se quedaban sin Klay Thompson, que era elminado por faltas mediado el cuarto. Los Clippers volvieron a tener un pequeño arreón , y parecía que la remontada era posible, pero de nuevo los de casa reaccionaron para distancarse definitivamente gracias a varios buenos ataques culminados por Harrison Barnes, que jugó los minutos del eliminado Thompson, y asegurar la victoria para empatar a dos la serie, con un marcador final de 118-97.
Stephen Curry fue el mejor del partido sin lugar a dudas, con 33 puntos, 7 asistencias y 7 rebotes, acompañado por un gran Andre Iguodala, que sumó 22 puntos, 9 asistencias y 4 rebotes, mientras que Lee y Thompson anotaron 15 tantos cada uno. En el lado visitante, Jamal Crawford fue el mejor con 26 puntos, mientras que Blake Griffin se quedó en 21 puntos y 6 rebotes.