Después de siete partidos de Pre-Saeson (2-5) y tres de Regular Season, (1-2) podemos comenzar a realizar un análisis de los New York Knicks, que así a simple vista, y echando un ojo a los números, no es muy esperanzador.
Bien es cierto que la Pre-Seson no sirve para sacar grandes conclusiones, por los continuos cambios de Woodson, para elegir el grueso de la plantilla para afrontar la temporada, en la que ya estamos metidos de pleno.
Ahora sí,podemos echar la vista atrás en esta semana de competición y analizar los porqués de estos números.
La temporada se inaugura con el partido frente a los Bucks, que sin desmerecer, y a primera vista, se antoja un rival asequible. Y así comienza el partido hasta el descanso, ofreciendo un nivel muy alto, y dejando a los Bucks tras los primeros 24 min, con muy pocas opciones. Nada más lejos de la realidad, ya que el tercer cuarto se transforma el equipo y ofrece su peor cara, dándole vida al rival y complicandose el partido, hasta el punto que no consigue resolver el partido hasta el final del encuentro, con una acción de Melo, y dos acciones excelentes de Chandler, una defensiva y otra ofensiva, que terminan por dar la victoria al equipo.
El segundo encuentro nos lleva al United Center, a una cancha que en la historia reciente no se le da nada bien a los neoyorquinos, con lo que se presume un partido muy complicado, y así es. El encuentro se desarrolla bajo unas pautas previsibles y los Knicks siempre van por detrás, a remolque de los Rose, Deng, Boozer y compañía, ofreciendo la cara más apática, y recordando así el tercer cuarto contra los Bucks. Aún así el equipo de la mano de Carmelo y Shumpert, consigue llevar el encuentro igualado a los últimos segundos y obliga a Rose a ganar el partido en la última acción de ataque de los de Chicago.
Anoche era el turno de la visita de Ricky Rubio y sus Wolves al Madison. Conformarse con el resultado final(100 -109), aún siendo una derrota, suena duro, pero si vemos el resultado al término del primer cuarto, (19 - 40) puede parecer un bálsamo. El equipo está perdido durante todo el encuentro y con una preocupante facilidad para perder balones que Kevin Martin y Kevin Love, aprovechan para fusilar al equipo desde cualquier lugar del campo, pero sobretodo a la contra aprovechando el despropósito de los de naranja. Sólo el acierto de Carmelo y el coraje de Metta World Peace consiguen acercar al equipo siendo sólo eso, un tímido acercamiento para terminar sucumbiendo ante 'los Kevin', Ricky y sus Wolves.
Después de ver todo esto se plantean muchas dudas, claro está, pero las principales, me parece que son la falta de un Center que de solidez al trabajo en la pintura, esencial en la Conferencia Este. Sí es cierto que Chandler ha comenzado a buen nivel, pero Amar'e no está, y se le espera más bien poco, y Kenyon Martin, más o menos igual. Sorprendió el buen nivel del año pasado, después de su llegada de ningún equipo, pero no ofrece el nivel necesario para aguantar al 100% las rotaciones.
No podemos encomendar el equipo entero y todo el rato a Carmelo Y esperando la llegada de JR Smith, tras su lesión, y su sanción de cinco partidos, por consumir estupefacientes, aparece la figura del novato Tim Hardaway Jr. Al que se le apuntan maneras pero también la precipitación, lógica, de un novato.
Con todo esto no queda otra opción que apelar a las cosas positivas, que las hay, y las iremos analizando poco a poco y apelar al coraje y a la buena defensa que muestra el equipo cuando todos están enchufados.
@mikiedealer
Gran y buen articulo, sigue así
ResponderEliminarYeah! ;-)
ResponderEliminarYeah! ;-)
ResponderEliminarMu rico
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