Tres partidos después de mi última entrada para esta sección, queda demostrada la máxima que venimos repitiendo como si de un mantra se tratara: cuando a Melo no se le deja solo en la cancha, es posible vencer a cualquiera.
El jueves nos enfrentamos a los vecinos heridos de Brooklyn y los números reflejan lo que apuntamos. Anthony anota 19 puntos, pero le acompañan Shumpert con 17, Bargnani 16, Felton 13, Tim Hardaway Jr 12 e incluso Amar'e Stoudemire alcanza las dobles figuras en anotación con 11 tantos. El partido se resuelve sin grandes dificultades y con una gran sensación en ataque, fluidez, muy buena circulación de balón que desemboca en una buena selección de tiro, y por consiguiente una gran anotación desde el perímetro. Estas armas son más que suficientes para doblegar a los Nets por treinta puntos, lo que no es motivo para una alegría desmesurada, porque estos no están muy finos durante toda la temporada y sufren las bajas de Deron Williams y Paul Pierce.
Sin tiempo para celebrar, se encara el día siguiente el enfrentamiento con los Orlando Magic, siendo el resultado igual de satisfactorio, ya que se gana el partido por 38 puntos de diferencia. Esta vez son seis los compañeros que acompañan a Carmelo anotando 10 o más tantos (Melo 20, Bargnani 17, JR Smith 17, Tim Hardaway Jr 15, Felton 14, Metta World Peace 12 y Shump 10) frente a esto poco puede hacer Orlando y sucumbe ante un gran equipo.
Llega el domingo y llegan los Celtics después de estas dos grandes victorias consecutivas y el equipo se vuelve a poner el traje naranja para enfrentarse a los de Boston. El resultado no puede ser peor y se obtiene la derrota más dura de lo que llevamos de temporada perdiendo por 40 puntos en un partido que casi en el primer cuarto queda visto para sentencia. No voy a ser yo el que peque de exceso de superstición, pero desde luego lo que queda claro es que con la camiseta naranja se nos resiste la victoria. Esta vez a los 19 puntos de Anthony solo le acompañan un gran Stoudamire con 17 y MWP con 12.
Con esta perspectiva se esperan decisiones drásticas que pueden afectar a Woodson, pero no llegan. Y fuera de supersticiones de camisetas naranjas, blancas o azules y apelamos a la unidad, a la garra y sobre todo a la calidad como equipo, que la hay y mucha, para remontar el vuelo y colocar a la franquicia donde debe estar.
Esta noche es el turno de demostrarlo y de enfrentarse a los Cavaliers de Irving y compañía.
Knicks all day!
@mikiedealer
