Una de las frases más famosas de la Historia es la archiconocida de "Veni, Vidi, Vici" (Vine, Vi, Vencí) que se atribuye al emperador Julio César tras una victoria en la que su ejército apenas tuvo que batallar. La frase se suele emplear cuando uno logra resolver una empresa difícil de manera muy rápida. Esta era la frase que los fans de los Lakers y de Kobe querían emplear anoche en el partido de su regreso pero al final tuvieron que conformarse con "Veni, Vidi, Victus" (Vine, Vi, Perdí), y es que la sola presencia de Kobe en pista al estilo cadáver del Cid sobre su caballo no va a hacer que los rivales entreguen la victoria en bandeja a los angelinos.
La temporada de los Lakers, hasta el momento, estaba siendo bastante mejor que la más optimista de las expectativas que hubiera rodeado al equipo. La marca era de 10-9 pero lo mejor era que por primera vez en meses, el equipo jugaba en equipo. Mike D'Antoni usaba a 10 jugadores por partido. Sólo 2 promediaban más de 30 minutos (Steve Blake y Pau Gasol). Los puntos se repartían entre todos los jugadores ya que un día el máximo anotador era Jodie Meeks, otro Pau Gasol, otro Wesley Johnson, otro Xabier Henry, otro Jordan Hill ... cada día era un jugador distinto el que recibía los focos y todos se sentían parte importante del equipo.
Y llegó el domingo.
Kobe Bryant regresaba ante los Toronto Raptors, el equipo al que le anotó 81 puntos el 22 de Enero de 2006. El equipo contra el que Kobe tenía una marca de 13-1 jugando en el Staples Center. El equipo que acababa de traspasar a su mejor jugador, Rudy Gay, por lo que no se vestiría de corto.
Todos se las prometían muy felices.
Pero como suele pasar en este tipo de partidos en los que el equipo local está sobreexcitado y el equipo visitante no tiene nada que perder, éste último no quiere ejercer su papel de convidado de piedra y poco a poco se hace con los mandos del partido mientras que los locales, Lakers en este caso, siguen hipnotizados, tanto jugadores como público, por el regreso de Kobe Bryant.
Vaya por delante que el culpable no es Kobe Bryant. Un jugador que regresa de una lesión tan grave como la rotura del tendón de Aquiles y que regresa en un tiempo récord, no puede ser el héroe del equipo y anotar 25 puntos por partido como si nada hubiera pasado.
Kobe jugó más de lo esperado, casi 28 minutos, y cuando el partido llegaba al final, Xabier Henry, el jugador más en forma de los Lakers, anotaba un triple que ponía el 81-86 a falta de 6:53 para el final del partido, y Mike D'Antoni cometió el error de sacar a Henry, un jugador enchufado, y meter a Kobe, un jugador falto de ritmo competitivo. Resultado: los Raptors manejaron los últimos minutos y robaron el partido en el Staples.
Los números de Kobe al final no fueron malos para un jugador que regresaba de una lesión brutal, pero sí son malos para un jugador líder que domina los minutos finales de su equipo en un encuentro igualado. El problema no fue de Kobe, el problema fue de D'Antoni que no debió darle el 100% de la responsabilidad a Kobe cuando aún no tiene ritmo.
Kobe dijo a los periodistas: "Mi ritmo está totalmente fuera de sincronización, pero hoy ha sido el inicio y creo que ha sido bueno. Uno intenta controlar lo más que pueda. Hay que dejar de lado los sentimientos y hacer el trabajo. El recibimiento de la gente le hace a uno apreciar el juego, la ciudad y dar por bueno todo por lo que hemos pasado."
Kobe acabó el partido con 2 de 6 en tiros de 2 y 0 de 3 en tiros de 3. 9 puntos, 8 rebotes, 4 asistencias y 2 robos de balón, pero 8 pérdidas de balón que lastraron mucho las posibilidades de los Lakers en el partido.
En definitiva, que queda mucho trabajo por delante para que los Lakers amolden su juego a Kobe Bryant, a la par que éste va a ir cogiendo ritmo competitivo conforme avancen los partidos. Comienza una nueva temporada para los Lakers y sobretodo para Mike D'Antoni que ha demostrado poder gestionar unos Lakers sin Kobe. ¿Podrán seguir siendo los Lakers competitivos con Kobe Bryant en pista?
Paradójica situación.
Huberto Meersmans
Twitter: @hubermeersmans
Para mí no fue un mal regreso de Kobe. Lo que sí creo es que no tenía que haberle dado tantos minutos D'Antoni, y más sacrificando a jugadores como Henry que estaba haciendo un gran partido. Ni mucho menos perdieron ayer por Bryant. Me lo esperaba más limitado, y no, le veo prácticamente como siempre. Sólo le falta ritmo de competición.
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