Los problemas que hay en Cleveland parece que van más allá de una mala racha de resultados. Según informa ESPN a través de su periodista Chris Broussard, los problemas en el vestuario entre algunos de los jugadores claves del equipo son bastante graves.
El 13 de Noviembre, los Cavs visitaron Minnesotta y recibieron una cruel derrota a mano de los Wolves por 124-95. Una vez finalizado el partido, los jugadores y el equipo técnico se encerraron para que todo el que tuviera algún problema, tomara la palabra y expusiera sus quejas. Según Broussard, cuando el turno le llegó a Dion Waiters, éste no se tapó y acusó a Kyrie Irving y a Tristan Thompson de jugar sólo entre ellos, y que a menudo, no le pasan el balón. Thompson saltó ante las acusaciones y los dos jugadores estuvieron a punto de llegar a las manos de no ser porque el resto de jugadores se interpuso en el camino de ambos.
Según parece, Waiters y Kyrie Irving no se llevan demasiado bien debido a que Waiters piensa que Irving es el niño mimado del equipo. Le dejan defender relajadamente para así estar más fresco en el ataque donde el jugador está perdiendo demasiados balones últimamente así como realizando malos lanzamientos. Waiters, según Broussard, acusa al equipo técnico diciendo que cuando él hace las cosas que hace Irving, rápidamente le sientan en el banquillo.
No sé qué os parecerá a vosotros, pero da pena que uno de los equipos que estaban llamados a ser una de las sorpresas agradables del año dado el talento joven que hay en su plantilla (Irving, Waiters, Thompson, Bennett, Bynum, etc.) termine todo en la basura por la falta de compañerismo y espíritu deportivo colectivo de algunos.
Huberto Meersmans
Twitter: @hubermeersmans