Ante los últimos acontecimientos que
desmarcan la posibilidad de que la estrella y uno de los mejores pívots
de la NBA, Dwight Howard, haya podido caer en el interés de los Golden
State Warriors, han sido muchos los debates que han surgido en torno a
la figura del pívot de los Lakers. Howard, para quien no lo sepa, expira su
contrato el próximo 30 de junio quedando libre y a expensa de ofertas
que le lloverán por todos los puntos de la geografía estadounidense. Es
por ello que me ha llamado la atención el hecho de enumerar una serie
de razones que juegan a favor y en contra de que Howard juegue
próximamente en la bahía de San Francisco. Así que, allá vamos, deshojemos la
margarita:
- Howard Sí porque
no olvidemos que aunque se haya firmado una temporada bastante mediocre
sigue siendo para muchos (para mí también) el mejor pívot de la NBA e
indudablemente el jugador con mayor potencial que pise la pintura
habitualmente. Aún consumando su peor temporada teniendo en cuenta el
nivel que se esperaba que diera en Lakers, el nacido en Atlanta ha
firmado 17.1 puntos por partido, 12.4 rebotes y 2.4 tapones en casi 36
minutos de juego por encuentro, números sólo al alcance de pívots como
Brook López, Tim Duncan, Zach Randolph, Marc Gasol o Kevin Garnett. De
hecho sólo el pívot español y Brook López han sido capaces de superarle
en 2 (puntos y tapones) de los 3 apartados estadísticos citados
anteriormente. Con todos estos datos Howard se convierte en un plato
suculento porque el que babea media NBA.
- Howard No
ya que supondría un desembolso muy importante en la franquicia y hasta
innecesario teniendo en cuenta la gratificante temporada que acaban de
finalizar en los Warriors. Howard se ha embolsado en este último curso
un total de 19 millones y medio, así que teniendo en cuenta otras
ofertas que pueda recibir no parece que baya a bajar de salario
precisamente, por lo que haciendo las cuentas de la lechera, reunir 20
millones para una franquicia que no le sobra el dinero precisamente y
que ya tiene comprometidos más de 73 millones (el límite salarial es de
58 millones) se antoja prácticamente imposible a menos que decidas
deshacerte de Andrew Bogut y David Lee como mínimo.
- Howard Sí
porque tras vivir una temporada a la sombra de las malas decisiones de
D'Antoni que no hacían más que perjudicarle, a la sombra del liderazgo
ejecutivo de Kobe Bryant con el que no se entendía en absoluto y a la
sombra de una franquicia llena de glamour y pedigrí donde no sentía nada
más que la presión por estar obligado a dar su mejor nivel para lograr
los ambiciosos objetivos proyectados a principio de curso, ahora
llegaría a San Francisco, en un ambiente rotundamente diferente donde
volvería a ser el líder como en Orlando y donde se el público le
animaría con fervor a poco que muestra una pizca de sus espectaculares
jugadas de highlights
- Howard No
porque continuando con la razón anterior que estaba en contra, la
llegada de Howard supondría no sólo remodelar parcialmente los
protagonistas de este equipo sino también cambiar casi por completo el
baloncesto y la manera de jugar de estos Warriors que tanto nos han
gustando en Play-Offs. Se perdería la magia del baloncesto rápido,
ofensivo y habilidoso de la gente exterior a cambio de surtir de balones
a Dwight, y Curry se vería obligado a repartir más las posesiones en
los momentos cruciales de partido perdiendo caché y liderazgo dentro del
grupo, algo que probablemente no le agradaría.
- Howard Sí porque
pensando también el juego que puedan desplegar en cancha, Dwight Howard
como es habitual en todos los equipos en donde ha jugado, arrastraría a
muchos defensores permitiendo, si su habilidad se lo permite repartir
mejor el juego a los exteriores, muchos de ellos libres de marca. De
hecho no olvidemos que bajo este sistema de juego construido por Van
Gundy llegaron los Magic a la Finales de la NBA en 2009. Por lo que si
Mark Jackson supiese enfocar y explotar este método de juego de
dentro-fuera, los Warriors podrían hincharse a anotar triples y tiros
lejanos teniendo en cuenta el surtido de tiradores con los que cuenta en
el perímetro, empezando por Curry, mejor triplista del pasado curso, y
sin olvidarnos de gente como Klay Thompson, Harrison Barnes, Jarrett Jack
(si continúa) o Brandon Rush.
- Howard No
porque el cambiar buena parte del equipo supondría un riesgo ante la
situación de incertidumbre que puede crear el forma un conjunto renovado
con un modo de juego diferente al anterior. Además viendo que el Howard
de Lakers muchos nos hemos dado cuenta que el experimento no es 100% ni
mucho menos, por lo que la posibilidad de fracaso existe, algo que no
podría permitirse una franquicia como la de los Warriors, que se ha
pasado 5 temporadas consecutivas teniendo vacaciones a partir de
mediados de abril, que sólo ha pisado Playoffs dos veces en los últimos
20 años, que no gana un anillo desde 1975 y que está a punto de
consumar su desplazamiento a San Francisco.
- Howard Sí
porque, a mención de ese desplazamiento a San Francisco, Howard se
podría convertir en la próxima imagen de los Warriors, un gran reclamo
publicitario del que se beneficiría económicamente la franquicia y una
buena manera de atraer a un mayor número de aficionados al futuro
pabellón de San Francisco. Además Howard podría convertirse en el
principal pilar y estrella para conformar un largo y ambiciosos proyecto
ganador bajo una franquicia no acostumbrada a celebrar grandes logros.
Sin duda el experimento sería interesante de descifrar.
- Howard No,
porque si su llegada supone la salida de otros, sería un golpe muy bajo
y poco sentimental a jugadores como Bogut, Lee o Landry que han sido
fundamentales para que estos Warriors se metieran en Playoffs y dieran
la campanada ante Denver. Es ahí donde se tendría que ver los escrúpulos
y el sentimiento empresarial de una figura como la de Joe Lacob,
propietario mayoritario de los Warriors.
Así que a grandes rasgos, los Warriors deben elegir entre conformarse
con la actual plantilla, que no es poco, con la que todavía pueden
progresar medianamente pero de la que mucho se duda su potencialidad
para pelear por el anillo o arriesgar y pescar al suculento Howard
pudiendo dar un salto cualitativo importante y pelear por el anillo
desde ya si le rodean bien y si consiguen mantenerse muchas piezas
válidas de la linea exterior, pero con el consiguiente riesgo de
fracasar como ya le ha ocurrido a Lakers aunque a diferencia de ellos
teniéndote que tragar un jugoso contrato que promete ser largo.
Es momento de dar vuestra opinión: ¿Serán
capaces los Warriors de convencer a Howard para que vaya a SF? ¿Podrán
los GSW reunir el margen salarial necesario para contratarle? ¿O pensáis
que volverán a confiar en los Lee, Curry, Bogut y compañía?
Twitter: @jjuanma16