Lionel Hollins ha sido el gran beneficiado de la polémica entre Jason Kidd y la directiva de los Brooklyn Nets que ha acabado con Kidd en los Milwaukee Bucks y con los Nets repescando a Hollins para llevar las riendas del vestuario de los Nets.
En la rueda de prensa de su presentación, Hollins quiso dejar claro que no venía a Brooklyn sólo a entrenar, que no tiene las aspiraciones de más poder que sí tenía Kidd.
Entrenar es lo único que quiero hacer y es lo que soy. No quiero el trabajo de General Manager, no quiero el trabajo de nadie más en la franquicia. Quiero hacer lo único para lo que me han contratado.
Sobre cómo jugarán los Nets, Hollins quiere que éstos jueguen con un poco más de ritmo.
Sé que quiero jugar a un ritmo un poco más rápido del que ellos han jugado, incluso del que jugamos en Memphis. Eso no significa que quiera que juguemos arriba y abajo lanzando tiros a lo loco. Quiero ser agresivo.
Cuál fue el problema que hizo que Hollins saliera de los Grizzlies.
Trabajar ahí fue difícil porque no se trataba de entrenar, de las analytics o de cualquier otra cosa. El tema fue simplemente que el que mandaba quería a otra persona en mi puesto pero lo fácil era decirle a la afición que me despedían porque no hacía lo que me pedían.
En definitiva Lionel Hollins está muy ilusionado por la oportunidad de volver a entrenar al máximo nivel.
Sé que es un reto pero si uno quiere tener éxito, tiene que pasar por muchas dificultades y superarlas. Realmente estoy muy ilusionado con esta oportunidad que me brinda Brooklyn. Es increíble pensar que estoy aquí ahora cuando hace dos semanas este puesto ni siquiera estaba vacante.
Desde NBA Destiny la mejor de las suerte para un grandísimo entrenador que no tiene el nombre y respeto que debería.
Buen fichaje de Brooklyn, quizás el que debería haber hecho el verano pasado.
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