“Si dejamos claro que vamos a
tankear, nadie entra el pánico, porque “es parte del plan”. Pero cuando dejo
caer la posibilidad de traspasar a Michael Carter-Williams, ¡todo el mundo
pierde la cabeza!
El Jóker
– Sam Hinkie
Se
puede estar de acuerdo o no con el camino que ha seguido la franquicia, pero lo
que no se puede rebatir es que la temporada de Philadelphia ha sido
consecuente. Desde el traspaso de Jrue Holiday al de Evan Turner el objetivo
estaba claro: conseguir una elección del draft lo más alta posible, y en
función de ello se ha actuado.
Pero
llegó la lotería del draft y la suerte no sonrío a los Sixers todo lo que
debería (o quizá es que sonrió de más a Cleveland). Parece que en Philly el
pick número tres genera dudas porque, a
pesar de asegurarse una de las vacas sagradas del draft (Embiid, Wiggins o
Parker), están a expensas de lo que decidan Cavaliers y Bucks, y a priori ambas
franquicias tienen previsto hacerse con los servicios de un alero.
Esto
dejaría a Embiid para la ciudad del amor fraterno, lo que en teoría no es lo
ideal con Nerlens Noel en plantilla (si pinchas aquí verás que eso no tienerazón de ser). Esa posibilidad ha llevado a la directiva a pensar en elegir a
Dante Exum traspasar por el camino a
Michael Carter-Williams. ¿El actual ROY fuera del equipo? ¡Locura!
En
los despachos de Philadelphia deberían sentarse, relajarse y pensar las cosas
con calma. Desde el día de la lotería se ha hablado de los Sixers casi más que
en toda la temporada regular y siempre por estar en medio de rumores de lo más
variopinto. Desde la mencionada salida de MCW, a intentos de trade-up para
hacerse con el número uno y tener disponible al jugador que quieren, y hasta a
traspasar a Thaddeus Young y algún pick de segunda ronda por la elección ocho
de Sacramento.
Ahora
es el momento de echar el freno y de que Hinkie siga haciendo lo que tan bien
ha hecho durante este curso: ser coherente. No hay que perder la cabeza, ya se
han dado los primeros pasos del proyecto, hay ciertas bases establecidas y en
el draft hay material para empezar a construir.
Lo
primero es tener claro que Carter-Williams, con todos sus defectos (demasiadas
pérdidas de balón, tiro irregular) puede y debe ser el base del equipo. En
Philly no van a tener presión hasta dentro de un par de años, por lo que el ex
de Syracuse tendrá tiempo de pulir esos aspectos y de optimizar sus puntos
fuertes, como las penetraciones a canasta, sacar ventaja de su altura en
defensa y posteos, y el hecho de ser una potencial amenaza de triple-doble cada
noche.

A
pesar de que todavía no ha jugado ningún partido, si está totalmente recuperado
Nerlens Noel va a ser la referencia interior defensiva de la plantilla. Es
joven, atlético y sabe lo importante que es proteger el aro. Cierto es que en
Kentucky su juego ofensivo se limitaba a hundir alley-hoops o a machacar tras capturar
rebotes ofensivos, pero tras un año entero prácticamente parado y desarrollando
fundamentos, es más que probable que haya mejorado su tiro en suspensión de
corta y media distancia, además de movimientos al poste.
Hay
que reconocer que la posición de Philadelphia en el draft no es la mejor
posible, está a expensas de lo que decidan dos franquicias por delante suya,
pero no se sabe lo que harán. La opción preferida por Philly es Wiggins, en
segundo lugar Parker y, como tercera opción, Embiid. El rumor de la salida de
MCW viene de la idea de que tanto Wiggins como Parker estarán fuera del mercado
cuando llegue el puesto tres, pero no son más que elucubraciones, es posible
que alguno (sobre todo Cleveland) se haga con el pívot de Kansas.
Sea
como fuere, cualquier opción sería válida para los Sixers. Wiggins aportaría un
plus de atletismo que encajaría bien con el ritmo de juego que se presupone
tendrá el equipo, Parker se convertiría en la referencia ofensiva, capaz de
crearse sus propios tiros; y Embiid podría jugar como pívot junto a Noel
ejerciendo de cuatro, compartiendo reponsabilidades defensivas y monopolizando
el primero el ataque interior.
Si
finalmente se decantan por elegir a Exum tampoco sería necesaria la salida de
Carter-Williams: ambos podrían formar juntos un backcourt muy versátil
alternando las funciones de uno y de dos según la situación. Entre los contras
de una formación así está la falta del un tirador exterior fiable (lo que se
podría resolver con un alero anotador) o que ambos jugadores son dados a tener
numerosas pérdidas, sin embargo entre los pros estaría tener dos jugadores de
gran tamaño y envergadura, lo que volvería locas a las defensas rivales, con
gran capacidad de penetración a canasta. No hay, pues, razón para que ambos no
puedan convivir.
Hay
que recordar que para complementar esa elección en el puesto tres Philadephia
cuenta con el pick número 10. Las opciones aquí varían en función del resto
de equipos pero van desde el poco probable Aaron Gordon hasta unos más que
viables Gary Harris, Nik Stauskas, Doug McDermott o Rodney Hood, todos ellos
jugadores exteriores con capacidad de tiro de tres, justo lo que necesita la
plantilla.
Por
último, aunque hay que coger con pinzas el rumor, hay que valorar la posible
salida de Thaddeus Young del equipo. El forward pidió a la directiva que le
traspasaran el pasado mercado de invierno, cosa que no ocurrió, pero que podría
ser posible antes de la noche del draft.
Cobrará
9,1 millones la temporada que viene y tiene una opción de jugador de 9,7 para
la 2015/16, por lo que no es precisamente barato, pero es un jugador “veterano”
que puede aportar experiencia desde ya a un equipo que busque entrar en playoffs
o a uno que no quiera ser barrido en primera ronda. Teniendo en cuenta que en
Philly querrían de vuelta talento joven o elecciones de draft, los más
plausible (aunque no tiene porque pasar) sería un traspaso Young + una o dos
elecciones de segunda ronda por el pick ocho de Sacramento, que la franquicia
de California ha dejado claro que está en venta.
Esa
elección daría un cariz totalmente nuevo al draft de los Sixers. ¿Tres
elecciones entre las diez primeras en una clase profunda y con tan buenos
jugadores? Aunque no se diera el caso y finalmente solo tuvieran las dos actuales, es material de sobra para empezar a construir (que no reconstruir) sin
necesidad de tirar por tierra lo poco bueno que ha tenido durante este año la
franquicia.