Si en la vida todo es relativo, en deporte lo es aún más dependiendo con el color del cristal con el que se vea una situación. Para muchos, la temporada de los Sixers es un fracaso ya que han sido el segundo peor equipo de la liga y han empatado el récord de mayor número de derrotas consecutivas (26).
Para otros, en cambio, la temporada puede considerarse un éxito ya que los Sixers parece que están en el buen camino de la reconstrucción de la plantilla ya que, casi con total seguridad, tendrán al Rookie del Año, Michael Carter-Williams, Nerlens Noel está recuperado de su lesión de rodilla y promete mucho, Thaddeus Young sigue su progresión y es probable que tengan un top-3 del Draft lo que significaría que la temporada que viene contarían con Andrew Wiggins, Joel Embiid o Jabari Parker.
Ese parece que es el punto de vista del propietario de la franquicia, Josh Harris que ha dicho "creo que la temporada ha sido un gran éxito. Obviamente no me gusta perder. En términos de derrotas ha sido una temporada dura. Fue increíblemente divertido eliminar a los Bulls en los playoffs de 2012 cuando ellos eran #1 y nosotros #8 en el Este. Queremos regresar a los playoffs y competir por el anillo. Eso es lo que estamos intentando hacer. Para ser un equipo de la élite no hay atajos. Llegamos aquí sabiendo que sería una temporada larga y que debíamos ir colocando poco a poco las piezas en los lugares correctos."
Durante la racha de 26 derrotas consecutivas Harris "lanzaba objetos a la tele, la apagaba, intentaba ignorar la situación pero es difícil hacerlo. Emocionalmente hablando fue una época difícil. No me gusta perder. Para esto no compré el equipo. No me gusta vivir una temporada así."
Respecto al famoso tema del tanking, Harris tiene claro que "los Sixers no salimos a perder, salimos a ganar. Quiero decir que nuestro objetivo es ser un equipo de la élite. Para llegar a ese punto desde donde estamos, hay que desarrollar jugadores. Hay decisiones que tomar. Creo que la liga está en gran forma ahora mismo. Las asistencias a los pabellones son altas y hay mucha igualdad entre los equipos, por lo que no creo que haya una percepción negativa de la liga."
Veremos qué sucede en el sorteo del Draft y si los Sixers tienen más motivos para encarar la próxima temporada con mejores sensaciones que la que acaba de terminar.
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