Dicen que a perro flaco todo se le vuelven pulgas, pues en la NBA vamos a tener que acuñar el refrán de que a pelícano desplumado todo le produce un resfriado, o algo así.
Los New Orleans acaban de hacer un comunicado oficial (ver original) informando de que Jrue Holiday, de baja desde el pasado 8 de Enero, no volverá a jugar con el equipo en lo que queda de temporada debido a que pasó por el quirófano para curar una fractura por estrés en su tibia derecha.
En los 34 partidos que Jrue Holiday ha jugado para los Pelicans, sus promedios han sido de 14.3 puntos, 7.9 asistencias y 1.6 robos en 33 minutos de juego.
A la baja definitiva de Holiday, hay que añadir la de Ryan Anderson por una hernia y los numerosos problemas físicos de Anthony Davis y Tyreke Evans. En definitiva, que un equipo que estaba llamado a ser una de las sorpresas del año por el gran talento joven que hay en su plantilla, apenas ha podido demostrar nada debido a tanta lesión.
Aunque me sabe mal decirlo, creo que es el momento de plantearse seriamente la posibilidad del tanking en Nueva Orleans, pero yo no he dicho nada.
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