No cabe duda de que el primer año de Brandon Jennings en Detroit, y de toda la plantilla en general, ha sido un gran fracaso.
Los Pistons apenas ganaron 29 partidos a lo largo de la temporada, borrando de un plumazo las grandes expectativas que había creado durante el verano, donde se presentaba como una de las grandes alternativas en la Conferencia Este.
El propio base de la franquicia de Auburn Hills ha querido hacer autocrítica de su mala temporada, según palabras suyas al medio Detroit News, la que ha sido su peor temporada desde que llegó a la NBA.
Voy a ser honesto. Éste ha sido mi peor año. He tenido que hacer frente a todo tipo de cosas. Una fractura de mandíbula, mi pérdida de peso, no poder disputar la pre-temporada... Cuando por fin pude coger un ritmo, Mo (Cheeks) fue despedido y regresó de nuevo la dinámica negativa. Ha sido mi peor temporada, una montaña rusa.
Sin embargo, este mal año ha servido de aliciente y revulsivo a un Jennings renovado, el cual ha trabajado duramente para ganar peso (ha ganado 11 kilos) y comprometerse en el aspecto defensivo del equipo bajo las órdenes de Stan Van Gundy.
Él (Van Gundy) es muy detallista y no deja pasar nada por alto. Nos ha dejado claro que vamos a tener que implicarnos todos en el aspecto defensivo y darlo todo cada noche. Tenemos una gran plantilla. Tenemos que esforzarnos al máximo todos y darlo todo en defensa por el bien del equipo.
Durante la pasada temporada, Jennings disputó un total de 80 encuentros de temporada regular, firmando unos promedios de 15.5 puntos, 3.1 rebotes, 7.6 asistencias y 1.3 robos por partido.
