OPINIÓN | Los últimos destellos de Pau
A simple vista, el titular podría parecer un poco pesimista, es cierto. Sobre todo, si tenemos en cuenta que hablo acerca del mejor jugador de baloncesto español de la historia. Y uno de los mejores europeos. Pero en algún momento habrá que asumir que los días de Pau Gasol en la NBA están cada vez más contados.
Al mismo tiempo que se producía la celebración del ‘All Star Weekend’, y teniendo en cuenta que este año lo habrá visto desde el sofá de su casa, Pau ha aprovechado para reflexionar sobre su actual situación en Los Ángeles Lakers. Mil y unas historias se han contado hasta ahora sobre su posible traspaso. Por todos es sabido que la intención de la franquicia angelina es rebajar su masa salarial a costa de deshacerse del pivot español. La opción que parece estar más encaminada es la de los Phoenix Suns. No obstante, aún no hay nada claro. Y esto es lo que piensa el propio jugador.
"Nunca se sabe. Quizá haya jugado mi último partido en los Lakers. Quizá no. Todo puede ocurrir. La semana que viene se cierra el periodo para hacer traspasos y es mejor tomárselo con cierta filosofía. Mi prioridad es seguir, pero sé que los Lakers están negociando con los Suns", decía Pau Gasol en la columna semanal que escribe para el Diario Marca. Muchos se niegan a verle acabar su periplo baloncestístico sin la camiseta dorada y púrpura, pero va siendo hora de asumir la cruda realidad. Hasta él mismo parece que lo ha hecho ya.
Desde mi punto de vista, la mejor opción para Pau pasa por hacer las maletas. Nadie duda de su calidad, pero con 33 años no puede sumergirse en un proyecto de larga reconstrucción, como es el futuro que se le avecina a la franquicia de California. Y en mi humilde opinión, tampoco Phoenix es un buen destino para poner la guinda a su carrera. Lo más adecuado sería una operación del estilo a la que mandó a Scola desde los Suns a Indiana hace menos de 1 año. El perfil de Gasol encaja en cualquier franquicia con garantías reales de coronarse campeón. Tiene experiencia de sobra, calidad y muchas ganas de seguir demostrando lo que vale.
Ahora Pau Gasol debe decidir entre volver brillar en algún equipo con grandes aspiraciones a corto plazo, o apagarse progresivamente en el estilo libre de lo Lakers y su profunda reconstrucción. Desvanecerse o volver a brillar, he ahí la cuestión.
